miércoles, 17 de octubre de 2007

Rodas, 1522

El 26 de junio de 1522 (siglo XVI), la pequeña isla de Rodas, situada muy cerca de la costa turca, recibió la visita de 300 barcos que venían no precisamente en son de paz. Los Caballeros de San Juan (también llamados “del Hospital de San Juan de Jerusalén asentados en la isla desde 1310 y desde donde se dedicaban a guerrear contra el imperio turco), se enfrentaron a una amenaza muy seria.

Rodas era considerada una fortaleza inexpugnable, pero Philippe Villiers de L’Isle Adam, gran maestre de la Orden, con sólo 600 caballeros y 5000 soldados, más 7 barcos de guerra y careciendo completamente de artillería móvil, no pudo evitar que 100.000 turcos, comandados por Solimán el Magnífico, pusieran sitio al castillo donde se refugiaron los cristianos.

La Orden de los Hospitalarios, fundada en 1113 con el propósito de proteger a los que peregrinaban a Tierra Santa, había sido expulsada antes de este acontecimiento de tierra palestina y posteriormente de Chipre. Rodas era la última frontera delante del turco, a sólo 16 kilómetros de Anatolia y apuntaba como una flecha hacia los otomanos. Ahora Solimán, cansado de las correrías piratas de los caballeros cristianos se aprestaba a quitarse esa molesta espina. Los caballeros lo sabían y se aprestaron a una lucha a muerte.

A pesar de la gran diferencia de efectivos Rodas no era presa fácil. Estaba fortificada con gruesas y bajas murallas, rodeadas de fosos secos y parcialmente ocultos por explanadas hechas de tierra que resistían mejor a los cañonazos. El fuego de artillería ligera y los mosquetes podía hacer gran mortandad entre los atacantes y de hecho así fue.

Solimán se enfrentaba a su primer desafío en combate y confiaba plenamente en sus reorganizadas y aguerridas fuerzas y en el peso de su artillería. Por lo tanto empezó con un fuerte cañoneo que dio la impresión de acallar las defensas cristianas; pero al empezar el ataque de infantería, se encontraron que los caballeros, saliendo de sus refugios, habían resistido al implacable bombardeo y estaban dispuestos para la lucha. Las bajas fueron cuantiosas y el ataque resultó un desastre.

Varios ataques por sorpresa siguieron el mismo camino. Los zapadores y minadores se encontraron que sus intentos también resultaban vanos; un mar de llamas, producidas por gasolina incendiada, los achicharró varias veces impidiendo que las murallas saltaron por los aires. En la defensa de Rodas se destacó particularmente Gabriele Tadini di Martinego, especialista en fortificaciones recién llegado de Venecia. Su aporte fue esencial para detener los ataques turcos. Hizo instalar grandes tambores enterrados en el suelo, muy cerca de las murallas, con garbanzos encima. Cuando éstos empezaban a saltar era signo que los zapadores turcos cavaban en esa dirección. Así resultaba fácil preparar el contraataque.

Los cristianos resistieron en Rodas hasta el 25 de diciembre de 1522 y lograron que Solimán los dejase marchar a Creta. Caballeros, soldados y cientos de habitantes fueron así transportados hacia el exilio. Solimán jamás olvidó este sitio y cuentan los cronistas que la dura lucha le dejó una huella definitiva hasta su muerte el 4 de septiembre de 1566 en plena invasión de Austria.

Una excelente descripción de esta batalla puede encontrarse en el libro: “50 Batallas que Cambiaron el Mundo”, de William Weir, Inédita Editores, Barcelona, 2007.

viernes, 24 de agosto de 2007

El tanque

El tanque no es una invención contemporánea, ya Leonardo da Vinci, en pleno siglo XVI, diseñó un carro acorazado, con cañones, y naturalmente tirado por... bueyes. Sin hablar de las máquinas de guerra romanas, destinadas a derrumbar murallas, que bien podrían ser los antecesores remotos de esta arma.Pero el tanque tal como lo conocemos empezó su marcha a fines de la 1ª guerra mundial. Los británicos experimentaron con vehículos de motor sobre orugas, aunque al principio sólo se los pensó para arastrar la artillería sobre terrenos poco idóneos para los transportes tradicionales. Más de una idea se pasó a la otra y pronto se vió su utilidad para romper el estancamiento de la guerra de trincheras e impedir el fuego de ametralladoras que diezmaba a la infantería propia. Los tanques eran ideales para aplastar nidos de ametralladoras y los bunkers de las primeras líneas de fuego.
Utilizando como base el tractor norteamericano Holt se inventó este artilugio que, como decíamos, empezó a funcionar en 1916 durante la ofensiva del Somne. Su nombre de código era Mk I y se los registraba, en su envío al frente, para evitar el espionaje enemigo como "tanques de agua".Se diseñaron dos versiones a las que se llamaron poéticamente: macho y hembra. Los "macho" tenían dos cañones de 57 mm en salientes laterales, y las "hembras" llevaban cuatro ametralladoras. Se suponía que los "macho" eran los encargados de romper las líneas destruyendo los bunkers enemigos y las "hembras" acompañaban a la infantería en su ataque posterior.La efectividad de los tanques fue muy grande, pero más que nada debido al asombro y al terror que causaron en las tropas alemanas. Desde el punto de vista práctico eran poco fiables, se averiaban rápidamente y además no eran capaces de superar el barro cuando éste era demasiado para sus elementales orugas.
Curiosamente los alemanes, al contrario de lo que pasó en la segunda guerra mundial, no prestaron atención a la nueva arma y unicamente produjeron unos pocos del llamado A7V, un enorme vehículo acorazado de 33 toneladas, con una tripulación de 18 hombres, un cañón de 57 mm y 6 ametralladoras. En realidad era un castillo que se desplazaba. Una concepción muy poco razonable que no contribuyó a mejorar la opinión del Alto Mando alemán.Durante la primera guerra se desarrollaron en total cuatro modelos del Mk, y los francesas sacaron el Renault FT 17 que incorporó la novedad de colocar el cañón principal en una torre giratoria central. Este diseño tuvo éxito y posteriormente se generalizó a todos los tanques, tomando éstos la fisonomía habitual en esta arma.
Ahora, ya en el siglo XXI las fuerzas acorazadas están amenazadas por el desarrollo tecnológico. Los tanques son fácil blanco de cohetes (tanto lanzado por vehículos aereos como desde tierra) y su coste tan elevado puede volatilizarse en segundos. Se está experimentando con tanques pequeños, como de juguete, pero teledirigidos. Los alemanes ya emplearon estos artilugios en la segunda guerra. Probablemente tendremos en los próximos años grandes novedades en toda clase de armas y lo que si es seguro es que si los tanques siguen en la lucha... serán muy diferentes a lo conocido.

lunes, 9 de julio de 2007

Vacaciones

Hasta mediados de agosto no seguiré con el blog.
Reconozco que tampoco estos meses le hecho mucho caso. El problema es que hay tantas cosas sobre materia bélica en la red que sumar un simple duplicado tampoco me interesa. Tengo que encontrar el nicho, el lugar, la posición, adecuada para que este blog pueda aportar algo diferente; si bien no en la información, por lo menos en el punto de vista.
Así que aprovecharé las vacaciones para pensar sobre ello.

miércoles, 16 de mayo de 2007

El acorazado Bismarck

Pronto, el 27 de mayo, será el aniversario del hundimiento del famoso acorazado ligero de 45.000 toneladas, que al mando del Almirante Lutjens constituía en 1941 el buqué más poderoso de la marina alemana de guerra.
Este acorazado mostraba simultáneamente el poder de la tecnología alemana y el atraso conceptual de sus altos mandos, incluyendo a Hitler, que seguían pensando en los acorazados como los buques más importantes de cualquier marina que se precie. En ese mismo año se demostrará que otra clase de buques eran realmente los importantes: el portaviones (los norteamericanos se salvaron milagrosamente en diciembre de 1941 del ataque de la aviación japonesa en Pearl Harbour).
Si el rearme alemán, que a partir de 1936 avanzó a velocidad de tren expreso, hubiera incidido en el fortalecimiento de la flota submarina y en la creación de portaviones de apoyo, es probable que la guerra se hubiera alargado un poco más. Más no fue así y, reconociendo el heroismo de los marinos alemanes, nos congratulamos de tal ceguera.
El Bismarck iba a funcionar como buque corsario, destinado a colaborar con los submarinos nazis en la interrupción del transporte hacia Gran Bretaña, pero su singladura duró poco. El 24 de mayo una formación británica de cuatro buques lo descubrió en su salida. De inmediato el Bismarck se defendió y hundió al acorazado Hood (sólo 3 se salvaron de una tripulación de 2.500) y dañó seriamente al Pince of Wales. Cuatro días duró la persecución, siendo atacado por aviones y barcos como el King George V, el Rodney, el Norfolk y el Dorsetshire. Al final, sin timón y navegando en círculos fue hundió a 649 km. de la base alemana de Brest. Sus dos mil tripulantes también lo acompañaron al fondo del mar.
Fué un duro golpe para una potencia que en ese momento brillaba con todo su maligno fulgor; y un anticipo de lo que el destino le deparaba.

jueves, 3 de mayo de 2007

Japón, a principios del siglo XX

El libro Los Guerreros del Oro, de Sterling Seagrave y Peggy Seagrave, merece leerse para tener una idea de lo que pasó a fines del siglo XIX y principios del XX en el Este de Asia. Una recensión del libro se encuentra en < http://librosylecturas.blogspot.com/search?q=Los+guerreros+del+oro>
El 8-febrero de 1904 Japón lanza dos ataques sorpresa, uno contra la base naval rusa de Vladivostok y otro contra dos buques de guerra rusos anclados en el puerto coreano de Inchon. La flota del Báltico, rusa, enviada en largo viaje por el Zar para combatir a los japoneses es derrotada en la batalla de Tsushima, en mayo de 1905. Como consecuencia Rusia pide la paz y cede a Japón el sur de la isla de Sajalín, sus contratos comerciales con Manchuria y el control de su línea ferroviaria que atravesaba la zona.
Japón, inmediatamente declara la guerra a Corea y la toma bajo su dominio. El 22-agosto de 1910 Corea deja de existir como país es incorporada al territorio de Japón. Los japoneses instauraron una férrea dictadura para aplastar cualquier reacción coreana y establecieron una policia omnipresente, la Kempeitai, similar a la gestapo nazi, para erradicar cualquier respuesta de patriotas coreanos. Los japoneses expoliaron sistemáticamente toda la península coreana, utilizando extensivamente la intimidación, el chantaje, el secuestro y la brutalidad con los prisioneros, más de 140.000 en 1918. Toda Corea fue despojada, tanto de sus obras de arte, como de los productos agrícolas básicos, llevándolos en masa a Japón donde sirvieron para diversos fines políticos y para alimentar las ricas colecciones privadas de arte. Según el historiador coreano Yi Kibeck, el objetivo de la invasión japonesa fué: "erradicar la conciencia de una identidad nacional coreana, empezando por sus raíces, y borrar de ese modo de la faz de la tierra la existencia misma del pueblo coreano" ( pag.9, op. cit.).
La experiencia exitosa de Corea, llevó a los japoneses a invadir Manchuria y a establecer un gobierno títere que le permitiese las manos libres. El caso de Manchuria era diferente al de Corea, ya que carecía de grandes riquezas, en cambio el país tenía buena tierra, bosques y depósitos minerales que estaban listos para ser explotados. Y así fue, una rapiña desenfrenada se abatió sobre esta zona, del tamaño de dos Texas, y así fue como Manchuría se convirtió en el período de entreguerra en el principal centro asiático de drogas duras y en una colonia esquilmada del Japón imperial.

El detalle de esta operación puede leerse en el libro mencionado, y cómo tenemos muy poco material en español, la información que ofrece es esencial.

La ocupación de Manchuria sirvió al ejército japonés para establecer una base contra China y la zona fue utilizada para una serie de campañas relámpago sobre el Imperio del Centro ocupando cuatro provincias chinas; y para más recochineo el Japón anunció la “independencia” de Manchuria que pasó a llamarse Manchukuo con Pu-Yi al mando; el último emperador manchú de China encontró un gobierno que en realidad nunca pudo ejercer.

La historia de Pu-Yi y cómo colaboró con la ocupación japonesa en detrimento de su país es lamentable y en un mínima parte fue reflejada en la película “El último emperador” dirigida por Bernardo Bertolucci; lo que en la película no aparece es el duro régimen estblecido por los japoneses en todo el territorio supuestamente independiente. Una historia de saqueos y expoliación que todavía espera ser conocida y reconocida en nuestro mundo.

lunes, 19 de febrero de 2007

La carga de Balaklava

La llamada Guerra de Crimea empezó por un conflicto religioso entre monjes católicos y ortodoxos por la custodia de los Santos Lugares (de Jerusalén) en poder de Turquía. Turquía, apoyada por Inglaterra rechaza el ultimátum ruso del príncipe Ménchikov, que reclama el derecho de protección a los ortodoxos. Así sucede que en 1853 tropas rusas invaden los principados del Danubio, lo cual causa que Turquía le declare la guerra a Rusia. En septiembre de 1854 se produce un desembarco anglo-francés en Crimea; los aliados asedian Sebastopol (primera guerra moderna de trincheras) y triunfan en las batallas de Alma e Inkermann, no obstante las grandes bajas sufridas por la baja temperatura y el cólera. A raíz de estas pérdidas se hace famosa Florence Nightingale (1820-1910) quien funda la moderna asistencia a los heridos en combate. Hasta ese momento la mayoría de los heridos morían tanto por infecciones sobrevenidas a posteriori de la batalla cuanto por la falta de cuidados adecuados en los post operatorios.

En 1854 se produce la famosa batalla de Balaklava que mucha gente conoce debido a la película sobre el tema. Se trata de la carga suicida lanzada por la caballería ligera al mando de lord Cardigan contra los cañones rusos.

El 26 de septiembre los rusos atacan, al mando del príncipe Ménshikov poniendo en peligro el asedio a la ciudad de Sebastopol. Ante el peligro inminente lord Raglan, comandante en jefe del cuerpo expedicionario aliado, ordena a Lord Lucan, proteger el flanco norte de Balaklava. Éste interpreta mal la orden de su superior y pide a su cuñado, lord Cardigan un ataque frontal con su brigada ligera de caballería a la artillería rusa situada en el fondo del valle.

El 25 de octubre de 1854 a las 11 de la mañana se produce la famosa carga de la caballería contra los cañones rusos. Se consideró este episodio como "el fin de una época", ya que quedó totalmente demostrado la imposibilidad de la caballería de enfrentarse con la moderna artillería, cosa que hasta el momento resultaba aún discutible.

De los 673 hombres que participaron en la carga sólo regresaron 193. Del 13º cuerpo de Dragones sólo sobrevivieron dos oficiales y ocho soldados. La leyenda de los 600 cabalgando por el Valle de la Muerte, que cantaron los poetas, sobrevivió a la guerra y se convirtió en parte del imaginario del ciudadano británico.

La Guerra del Yom Kippur (o "Guerra del Ramadán")

Sucedió cuando, el 6 de octubre de 1973, a las 14 horas del "Día Sagrado de la Expiación", Yom Kippur, (cuando una gran parte de la población israelí pasa la jornada rezando), las tropas egipcias del presidente Sadat por el Oeste y las tropas del presidente sirio Assad por el Este lanzaron su ataque sobre Israel. La festividad religiosa fue un momento adecuado, aunque notablemente descortés, para atacar por sorpresa.

Si bien la penetración de las tropas egipcias resultó espectacular, con aquellos chorros de agua destruyendo las defensas judías, la más peligrosa fue la siria. Sí éstos tomaban la meseta del Golán, tendrían la posibilidad de asestar una puñalada mortal al corazón de Israel

Esta posibilidad no era ficción. Por un lado las dos brigadas acorazadas que guarnecían la frontera judía, la 7ª y la 188ª no estaban completas de efectivos y solo contaban, entre ambas, con unos 170 tanques. Por el otro tenemos a los sirios con tres divisiones mecanizadas, dos acorazadas y unos 1500 carros. Si bien el que se defiende tiene siempre mejor situación, la desproporción era tan grande que cualquier estratega podría dar por liquidada la posición israelí.

Así fue como en el primer momento los sirios dominaron el monte Hermón, una posición dominante sobre el flanco norte del despliegue israelí y poco después aniquilan a la 188ª Brigada. No obstante la desesperada resistencia de reductos aislados judíos les ocasionaron fuertes bajas. Además la 7ª Brigada resiste la feroz embestida con combates de carros disparándose a quemarropa. En la retaguardia judía reinaba el desconcierto y la posición llegó a ser tan crítica que a medida que la tripulación de los carros se iban completando marchaban directamente al frente (recordando, para el observador, la situación del frente de Moscú, en 1941, cuando las tropas que desfilaban en la ciudad iban directamente a combatir a los alemanes que ya habían llegado a la periferia). En los campamentos de reunión cuando cada tanque reunía su tirador, cargador, conductor y jefe de carro, aunque la tripulación podía no haber servido nunca juntos, partían con presteza. Muchos reservistas fueron directamente al frente en sus propios coches, según cuentan las crónicas.

De esta manera cuando el 9 de octubre quedaban sólo siete tanques de la 7ª en posición de combatir, una improvisada fuerza de trece carros lanzó un contraataque que desconcertó a las fuerzas sirias, completamente seguras en su marcha, y frenó en seco su avance.

En momentos tan cruciales los judíos consiguen reunir fuerzas para completar dos divisiones de refuerzo; pero en vez de enviarlas a reforzar el frente, en una situación tan débil como la comentada, arriesgan un ataque por los dos flancos de las fuerzas sirias, aprovechando la concentración en forma de cuña de éstas. Las unidades sirias, frenadas en su avance y al sentirse en peligro de caer en una bolsa mortal se repliegan con velocidad dejando gran cantidad de material bélico sobre el campo de batalla.

La batalla del Golán, al decir de los especialistas, fue el mayor enfrentamiento entre tanques desde la época, en la Segunda Guerra Mundial, de la batalla de Kursk. Participaron en total 2400 carros de combate, con pérdidas para los sirios de 800 tanques frente a 250 de los judíos.

El frente del Golán concluyó con la ocupación de 410 km. cuadrados de territorio sirio y 269 prisioneros. Unos 120 hombres del Zahal (Tsahal), el ejército judío, habían caído en manos sirias.

El frente egipcio también fue escenario de fuertes combates; pero las fuerzas israelíes consiguieron frenar el avance de las tropas enemigas en la península del Sinaí y un inesperado contraataque, la noche del 15 al 16 de octubre, del entonces general Ariel Sharon depositó a sus fuerzas paracaidistas y siete carros en la orilla oeste del Canal de Suez, en el extremo septrentrional del Gran Lago Amargo. Uutilizando pontones y algunos puntos de apoyo existentes, el 17 y 19 de octubre las fuerzas incrementadas de Sharon se despliegan en la retaguardia egipcia, eliminando los emplazamientos de mísiles soviéticos y permitiendo a los Phantom israelíes atacar posiciones enemigas. El alto el fuego encontró a Sharon ocupando 1.500 km cuadrados de territorio egipcio y nueve mil prisioneros en su poder. Por otro lado Egipto conservaba aún una franja de 11 km de ancho a lo largo de toda la orilla este del Canal y había apresado a unos 250 judíos.

Hasta el final de la contienda, en material, Egipto, Siria e Irak perdieron algo más de 1300 tanques, el Zahal perdió unos 840, aunque luego se recuperaron bastantes. Las fuerzas aéreas árabes habían perdido 368 aviones, dos tercios de ellos egipcios; Israel perdió 114. Según fuentes árabes las bajas fueron de 19.000 muertos y 51.000 heridos. Israel tuvo 7.500 bajas mortales, entre ellas 25 coroneles y 80 comandantes.

La guerra de Yom Kippur terminó con la victoria militar de los israelíes y la victoria política de Sadat, quién pudo demostrar a su pueblo que eran capaces de enfrentarse con los hebreos. El "Gran Cruce", así llamado por los egipcios, del Canal de Suez fue su gran baza psicológica y un gran recurso propagandístico muy utilizado posteriormente. El "contracruce" de Sharon en cambio, quedó silenciado como un episodio menor... aunque, sin embargo, fue el que determinó la intervención de la Unión Soviética, no dispuesta a permitir el derrumbe del régimen de Sadat, quién en ese momento le era muy favorable. Posteriormente Anwar el Sadat cambia de bando, se alía a EEUU y firma la paz con los judíos; pero ésa... es otra historia.

La batalla de Stalingrado

A mediados de Octubre de 1942 el General Von Paulus lanza el ataque más desesperado de toda la batalla de Stalingrado con el ánimo de desalojar totalmente las tropas rusas atrincheradas en una estrecha franja al costado del Volga. El 14 de octubre la ofensiva arrecia, escribe Vasili Grossman: "Sólo aquí sabe la gente lo que es un kilómetro. Un kilómetro son mil metros, o cien mil centímetros. Los subfusileros (alemanes) borrachos empujan con una testarudez lunática. No queda nadie que pueda contar como combatió el regimiento de Markelov... Sí, eran simples mortales y ninguno de ellos regresó" (1)

Rusos y alemanes entremezclados en un frente sinuoso se matan entre sí con furia y desesperación. En las alcantarillas de la ciudad, en los edificios destruidos por las bombas, en las fábricas arrasadas pero que aún mantienen en pié sus estructuras; por todas partes se dispara con todo lo que hay a mano, pistolas, subfusiles, ametralladoras... tanques, cañones y las baterías rusas de la otra orilla del río que a veces bombardean a sus propias tropas de cerca que están unas con otras. Ni siquiera el cielo estaba tranquilo ya que los Stukas atacaban también intentando desalojar a los rusos aferrados tercamente a sus posiciones.

Cuenta el periodista: "...estaba una mecanógrafa del cuartel general, Klava Kopilova, una gordita siberiana de rojas mejillas, que había comenzado a mecanografiar la orden de batalla en el cuartel general y quedo enterrada por una explosión. La sacaron fuera y siguió mecanografiando en otro búnker. Volvió a quedar enterrada y la extrajeron de nuevo. Finalmente acabó de mecanografiar la orden en el tercer búnker y se la llevo al comandante de la división para que la firmara".

Los relatos de los supervivientes son estremecedores; la mayoría quedó marcada para toda su vida por los episodios de esos meses. Las mujeres pelearon al mismo nivel que los hombres realizando sus tareas como si estuvieran en la retaguardia. Cuenta Grossman que cubrió la batalla desde el mismo lugar donde sucedió: "Nuestras chicas, con termos a las espaldas, nos traen el desayuno. Los soldados les hablan con mucho humor", y más adelante describe en una lista improvisada algunas de las bajas femeninas individualizándolas una a una : "Liolia Novikova, una risueña enfermera que no le tenía miedo a nada, fue alcanzada por dos balas en la cabeza. Nina Lisorchuk, herida. Katia Borodina, la mano derecha aplastada. Antonina Iegorova, muerta. Se lanzó al ataque junto con su pelotón. Era una enfermera en prácticas. Un subfusilero le disparó en ambas piernas y murió por la pérdida de sangre. Tonia Arkanova acompañaba a los soldados heridos y fue dada por desaparecida. Galia Kanisheva, muerta por la explosión directa de una bomba...".

La batalla prosigue día tras día sin interrumpirse, los soldados no duermen, o lo hacen en cualquier lado, rendidos, cuando ya no aguantan más. La distancia entre enemigos llega a ser de pocos pasos "Si se interrumpen las comunicaciones, es fácil comunicarse con los regimientos de viva voz" dicen, en broma, en el Cuartel General.

A pesar de todo, los rusos aguantaron el embate del, en ese entonces, el ejército más aguerrido y potente de la tierra. Aguantaron septiembre, todo octubre, noviembre..., hasta que las tornas se giraron y el 62º ejercito quedó encerrado y luego aniquilado a finales de enero del próximo año. El, por ese entonces, ascendido Mariscal Von Paulus (para que muriera cubierto de honor, como quería Hitler), prefirió, en cambio, la vida en cautividad junto con los sobrevivientes de su ejército, y la batalla de Stalingrado pasó a ser el punto de inflexión de la guerra y un símbolo de lo que puede hacer la gente cuando está dispuesta a no ceder.

(1) Las referencias entrecomilladas pertenecen al libro, recientemente aparecido en lengua española "Un escritor en guerra. Vasili Grossman en el Ejército Rojo, 1941-1945", de Antony Beevor, Editorial Crítica.

Italia Capitula

El 8 de septiembre de 1943 la BBC de Londres anuncia oficialmente la capitulación de Italia, en la II Guerra Mundial. El mariscal Badoglio, presidente del Gobierno, había huido con el rey Víctor Manuel la noche anterior. Simultáneamente comienzan los desembarcos en la playa de Salerno, al sur de Roma. Los alemanes, furiosos con la traición de su aliado, desarmaron fácilmente a las tropas italianas y en los casos en que éstas opusieron resistencia las atacaron con violencia. En la isla griega de Cefalonia, donde las fuerzas italianas repelieron varios asaltos de la 1ª división de Montaña del ejército alemán, cuando al final se rindieron fueron ejecutados 155 oficiales y 4750 soldados lo que constituyó un verdadero crimen de guerra.

El general Mark Clark al mando del 5º ejército comandó las operaciones sobre el terreno. Este general que había destacado como un brillante oficial de estado mayor resultó, según los estudiosos de su país, un desastre: "Ambicioso, implacable con sus subordinados, pródigo con las vidas de sus solados, poco comprensivo con las dificultades de otros ejércitos aliados, y más dado a sentirse impresionado por las apariencias que por la sustancia..." Así lo describen Williamson Murray y Allan Millett que en su recomendable libro: "La guerra que había que ganar" (Editorial Crítica), continuan "...Al modo de ver de Clark, había una proporción directa entre el esfuerzo militar y el número de bajas. Además, comprendía poco el marco táctico y operacional dentro del cual combatían sus fuerzas, y mostraba las peores cualidades del "general todo va bien" que detestaban los soldados" (pag.421).

Frente de guerra muy cruento que curiosamente ha sido relativamente ignorado por la literatura y el cine. Desde septiembre de 1943 hasta abril de 1945 el total de bajas aliadas fue de 312.000 bajas y el de los alemanes de 435.000. No contemos las de los civiles, pero probablemente cerca de un millón de personas entre muertos y heridos se llevó esta campaña.

Primera entrada

Este blog es el resultado de una actividad continuada en la lectura y reflexión de episodios bélicos muy variados en tiempo y lugar. Su nombre responde a una idea, para mi hartamente comprobada: que la defensa de la Paz no puede pasar por ignorar las amenazas externas sino por enfrentarlas con una actitud sabia y prudente... que implica no el desarme sino la preparación continuada para la Defensa en cualquier circunstancia y modalidad de ataque que la agresión se presente.